La varicela es una enfermedad común entre los niños, particularmente entre los menores de 12 años. Se manifiesta con la aparición en todo el cuerpo de una erupción que se asemeja a ampollas que producen bastante comezón, y puede estar acompañada por síntomas muy parecidos a los de la gripe. Por lo general, los síntomas desaparecen por sí solos. Sin embargo, debido a que la infección es muy contagiosa, se recomienda que un niño con la enfermedad permanezca en su casa y descanse hasta que los síntomas desaparezcan.