La entrada al Kinder es una de las experiencias más importantes en la vida de tu pequeño. La edad promedio a la que debería ingresar es a los 3 años, pero algunos lo hacen antes o después, dependiendo de las reglas que maneje el colegio.

Esta etapa es clave en su desarrollo escolar, ya que a partir de esta fase comenzará a enrolarse en uno de los procesos más largos y complejos de la vida, el estudio. Sin embargo, el jardín de niños va más allá de comenzar a entender las normas y formas de comportamiento de una escuela.

Primero, es el lugar idóneo para que interactúe con otros pequeños de su edad y que comience a trabajar en sus habilidades sociales. La educación y relaciones son más relajadas en el kinder que en la primeria y en muchos de ellos aprenderá con juegos y canciones, lo cual fomentará su desarrollo en interés por adquirir nuevos conocimientos.

También es importante que asista a un jardín de niños para que entienda que habrá momentos en los que tú no podrás estar presente, pero que no tiene nada de malo, por el contrario, es una manera de independizarse.

Quizá no sepas cómo elegirlo, no te preocupes, a continuación te damos algunos consejos:

Entorno: que satisfaga las necesidades de los niños tanto en salud como en seguridad.

Diversidad: que haya mucho movimiento y por ende, que no todos los niños estén haciendo lo mismo.

Programa: que haya énfasis tanto en el desarrollo social y emocional como en el logro académico.

Equilibrio: que ofrezca equidad entre el profesor y el niño, esto es, que ambos tengan la posibilidad de iniciar actividades y que no sea sólo el maestro quien las ponga en práctica.

Diversión: un lugar donde, para el ojo inexperto, parezca que los niños pasan mucho tiempo «jugando».

Tamaño: que los grupos sean de unos 15 a 20 niños como máximo, de forma tal que la atención del maestro, el material didáctico y el equipo sea suficiente para todos.

Experiencia: que tenga buena reputación. Deja los «malinchismos» a un lado, no te vayas por el nombre que solo le llega a tu ego o a tu «corazón». Investiga la trayectoria de la institución, la cual debe cumplir con todos y cada uno de los estándares mencionados, así como con profesores bien entrenados.

 

 

Es importante que antes de tomar una decisión visites tantos kinder como puedas, quizá te hayan recomendado uno por su nivel académico, pero cuando vayas a verlo te des cuenta de que no comulga con tus costumbres o tradiciones familiares o sientas que no va acorde con la personalidad de tu pequeño.

También pregunta si es posible que tu hijo asista antes de inscribirlo para que veas si se adapta al sistema del lugar.

Cuando sea momento de comenzar las clases, tu hijo puede reaccionar de diferentes maneras; muchos llorar porque sienten abandono, es iportante que le expliques que volverás por él en cuanto terminen las clases y que será una nueva experiencia que disfrutará mucho. Otros peques entran al jardín de niños sin problemas y se ajustan más rápido al cambio. Por ello, no debes presionarlo, recuerda que cada niño es diferente, por lo tanto, cada uno vive su experiencia de manera distinta.