Desde el inicio de las campañas de vacunación, los casos de enfermedades infantiles que eran frecuentes en el pasado, como el sarampión y la difteria, se ha reducido drásticamente. Las vacunas han protegido a millones de niños de enfermedades peligrosas y han salvado miles de vidas.
De hecho, algunas enfermedades son tan raras en la actualidad que los padres a veces se preguntan si las vacunas siguen siendo necesarias. Pero la mayoría de las enfermedades que se pueden prevenir con vacunas todavía existen en el mundo, incluso en países de primer mundo, aunque ocurran muy raramente.
La realidad es que las vacunas siguen desempeñando un papel fundamental en el mantenimiento de la salud infantil. Lamentablemente, algunos padres deciden no vacunar a sus hijos debido a la información errónea que tienen sobre las vacunas, exponiendo a sus hijos y a otras personas al riesgo de contraer enfermedades e, incluso, a la muerte.
¿Cómo funcionan las vacunas?